Cariño, está e la tranquila Comarca de Ortegal, situada en la parte más al norte de la provincia de A Coruña. Lindando al este con la provincia de Lugo, concretamente con la comarca de A Mariña Lucense, al oeste con la Costa Ártabra de Ferrol y al sur con la de comarca del Eume.
Comarca hermosa y tranquila de las Rías Altas, en Ortegal se encuentran las rocas más antiguas de la Península y las cuartas del planeta, según se demostró con unas muestras de granito negro extraídas de las mismas y también un área de gran interés medioambiental.
La Comarca está formada por los municipios de Cariño, Cerdido, Ortigueira y Mañón.
Tabla de contenidos
Itinerario: De Cariño a Estaca de Bares
Nuestro recorrido comienza en la costa atlántica de Cariño, y nos lleva desde Cabo Ortegal, pasando por Ortigueira bordeando su ría, hasta llegar Estaca de Bares -ubicado en Mañón-, el punto más septentrional de la península-donde el océano confluye con el Mar Cantábrico.
Cariño
Iniciamos nuestra ruta en el pueblo de Cariño, el cual se encuentra a tan solo 3 kilómetros de Cabo Ortegal, del que ya hablamos en el post «Peregrinando por la espiritual costa de Cedeira».
Cabo Ortegal
Si seguimos en dirección a San Andrés de Teixido llegaremos al bien señalizado mirador de A Miranda. Situado a 543 metros sobre el nivel del mar, este lugar es fantástico para obtener una panorámica de la Ría de Ortigueira y Ladrido, siempre que el tiempo esté despejado.
Desde el mirador de Punta Sulleiro podemos obtener una buena visión del Santuario de San Andrés de Teixido, un templo de construcción sencilla de estilo gótico marinero levantado en el siglo XVI sobre un viejo monasterio.
Ampliado dos siglos después, este templo sobre los acantilados, con sus muros de piedra oscura y helechos y palmeras que crecen a su alrededor parece un exótico templo canario.
Tras pasar la fuente de San Xián bajamos hasta cabo Ortegal. Esta es una de las maravillas geológicas y paisajísticas de la costa española, en buena medida por la existencia de los islotes Os Aguillons.
Nos podemos acercar a ellos navegando desde Cariño. Tomando el velero de Queresvela para navegar por la ría o desde o Porto de Espasante y ver, con suerte, a los percebeiros en acción, arrancando de las espumantes rocas el apreciado cirrípedo.
Las Marismas
Caminando hacia Ortigueira, en esta ruta las aguas atlánticas de la Ría de Ortigueira se unen a las de las desembocaduras de los ríos Mera y Beleo.
El punto de encuentro da lugar a suaves marismas y arenales donde pasan y proliferan gran cantidad de aves migratorias.
De hecho esta zona se ha declarado ZEP -zona de protección especial para las aves-para las aves y por ello es un verdadero paraíso el turismo ornitológico. La mejor época de avistamiento es entre finales de verano y los primeras semanas del otoño.
Ortigueira
Patrimonio
Ortigueira es un lugar para conocer caminando, primero por el paseo del Cantón, junto a las casas de estilo modernista, eso sí, con galerías. Entre ellas destaca la modernista Casa da Cordeira, antigua escuela y hoy biblioteca municipal, ejemplo radical de casa indiana.
También hay que visitar el Museo Ortegalia está ubicado en un antiguo cine de 1925 y que sirve de punto de interpretación de la ría de Ortigueira y Ladrido. Aquí se expone una réplica de la cámara megalítica más antigua de Galicia y se asesora sobre el patrimonio arqueológico de la comarca.
No puedes dejar el pueblo sin pasar por otro punto de interés; el teatro de la Beneficencia. De estilo románico, es uno de los pocos auditorios de este estilo que existen en España.
Rutas y playas
Es imprescindible caminar por una de las rías más icónicas de Galicia, desde el paseo de Barro Soto, siguiendo por el sendero costero que lleva al área de descanso de El Murito y la playa de Cabalar.
Al final de la ría se encuentra la playa de Morouzos, una bellísima playa rodeada de densos pinares desde la que ya se divisa el atlántico.
A la Isla de San Vicente, enfrente de la playa de Cabalar, hay que aproximarse solo en bajamar y la laguna de San Martiño, se descubre solo gracias a su pasarela.
También en Ortigueira merecen una visita las playas de: Ladrido, Espasante, San Antonio de Espasante y otras más alejadas de los pueblos como Sarridal o Fabega.
Espasante
Mención especial en este municipio de Ortigueira merece dos localidades, Espasante y Loiba. Espasante, por ser el lugar en el que curiosamente, el habitante más famoso es un cerdo, el cerdo de Espasante.
Cuidado con mimo por los vecinos para ser sacrificado el 13 de junio, este famoso vecino pasea por sus calles con total impunidad, tras ser indultado en varias ocasiones.
Loiba
La localidad de Loiba por su parte es conocida sobre todo por el Banco de Loiba, el mejor banco del mundo.
El origen de este banco que hoy en día atrae a miles de turistas en verano fue allá por el año 2009, cuando un vecino de Loiba llamado Rafael prieto sugirió al Ayuntamiento de Ortigueira que sería una buena idea colocar un banco frente a los acantilados salvajes, a un kilómetro de la aldea de Picón.
Unos meses después alguien escribió en inglés en la madera del banco la frase “the best bank of the world” –el mejor banco del mundo- y cuando se conoció, esto generó un efecto llamada a nivel mundial.
Y es que el anónimo se refería a que desde aquí se divisan una de las vistas más impresionantes del mundo; desde Ortegal a Estaca de Bares. El islote de Gavioteira, la playita de Coitelo, y un sinfín de acantilados llenos de la espuma que deja el mar al batir contra ellos.
Una inmejorable ubicación que ha sido utilizada en anuncios de Ikea o campañas publicitarias el de Turgalicia.
Más playas y miradores
Muy cerca del banco se encuentra la playa de arena blanca de Picón, señalada por un viejo molino proyectado sobre el océano y en cinco minutos en coche llegamos al mirador de Pena Furada, el islote que se erige de interés por la acción erosiva que el mar ha generado a sus flancos y en el que la derecha las olas golpean con tal fuerza que parecen generar un geiser.
También se divisa la playa de Ribeira do Carro, la cual cuenta con una pista de acceso y por la que subían hasta hace pocos años burros con cestones llenos de algas para el abono de los campos. Sobre el mar se encuentras las llamadas Tres Marías, unas rocas puntiagudas, mientras O Rodicio figura ser un submarino.
En Loiba también se encuentra los otros “bancos” de la ría. El mirador de O Cadaval. Luego buscando la lonja do porto de Espasante se encuentra el castro Punta dos Prados y el Monumento con Forno, una especie de baño turco del siglo III d.C.
El Mirador de la Garita da Vela es hoy un lugar para admirar la panorámica pero en otro tiempo servía como referencia para navegantes junto con el de Herbeira y Estaca de Bares.
Mañón
Ya en Mañón visitamos la ría do Barqueiro es de las más pequeñas de Galicia pero es tan bonita que dan ganas de salir en Kayak, una actividad que organiza Actividades Estaca.
O Barqueiro
Situada en el itsmo de la península de Bares encontramos la localidad de O Barqueiro con un puerto rebosante de encanto, con sus casas blancas esparcidas al alrededor del mismo y subiendo por la ladera verde mirando al mar.
Lo podemos admirar desde el mirador de la carretera a Lugo o paseando por sus muelles y contemplando la desembocadura del río Sor.
Ese mismo río que de alguna forma dio nombre a la localidad ya que en ella habitaba un mítico hombre al que llamaban “O Barqueiro” pues su trabajo era trasladar personas y mercancías de un lado al otro de la ría en la desembocadura del río Sor.
Esta tarea era clave entonces hasta que en 1901 se construyó el puente metálico que hoy luce junto al viaducto y que une esta localidad coruñesa con la provincia de Lugo.
Pueblo de Bares
Continuando nuestro itinerario llegamos al pueblo de Bares donde se encuentra una escollera construida por los fenicios.
El Porto de Bares es un buen lugar para comer algún exquisito plato marinero mirando al mar y luego dar un paseo por su playa para hacer la digestión.
Desde el pueblo de Bares continuamos nuestra ruta por un camino de tierra por el que casi se llega a la última piedra del cabo donde se encuentra el Faro de estaca de Bares, uno de los más bonitos de España y que divide el océano Atlántico del Mar Cantábrico.
El Faro de Estaca de Bares se construyó sobre una vieja base de la armada española, a unos cientos metros sobre el nivel del mar. Desde el, como el resto de Faros se guía la navegación en zonas costeras donde el viento, la niebla, o las escarpadas rocas la dificultan.
Hoy en día la mayoría de faros carecen ya de farero, ya que la tecnificación y automatización de los faros han hecho desaparecer su figura, convirtiéndolos en técnicos de sistemas de ayuda a la navegación y cuya labor suele limitarse a controlar su funcionamiento.
Nuestro itinerario concluye en Estaca de Bares, un lugar donde el viento predominante en esta zona hace necesario llevar ropa de abrigo incluso en verano. Cerca de su faro se encuentran los restos de unos antiguos molinos y un observatorio ornitológico donde damos por terminada esta magnífica ruta en el punto donde se juntan los vientos cantábricos y atlánticos.
