El valle de Ultzama encontrarás un sinfín de actividades que harán tu visita una experiencia inolvidable. Aquí podrás practicar senderismo, recorrer rutas a caballo, jugar al golf, recoger setas y entre otras muchas otras actividades degustar la excelente gastronomía navarra, la de antaño, la de siempre. Esto convierte al valle en un destino excepcional para visitar en familia.
El valle se encuentra a 25 kilómetros de Pamplona, tomando la N-121-A en dirección a Irún/Francia y luego la NA-411 que recorre todo el valle. Desde San Sebastián está a 73 kilómetros o de Bilabao a 158, el acceso se hace desde la autovía de Leizarán. Comencemos nuestro viaje!
Tabla de contenidos
Itinerario
En nuestro recorrido transitaremos por 14 pequeños pueblos con encanto a través de verdes parajes lo largo del río Ultzama. Aquí nos encontraremos pueblos con edificaciones muy cuidadas; Caseríos de piedra encalada con tejados a dos aguas, adornadas con plantas y flores. Iglesias enclavadas en un entorno idílico.
Destacan los cascos urbanos de Eltzaburu y Arraitz. Las casas blasonadas de Eltso, Gerendiain y Zanotz. Y las iglesias parroquiales de Urritzola, Galain Alkotz- -Ilarregi y Larraintzar, que ejerce de capital del valle.
En Alkotz se encuentra el Monasterio hospital de Santa Maria de Belade donde se encuentra la talla de Nuestra Señora de Belate, del siglo XII. En su entorno se encuentran los restos de la antigua calzada utilizada por los peregrinos del Camino de Santiago. También el Parque Micológico de Ultzama donde se ofrecen visitas guiadas y se proporciona información sobre el parque, cursos, actividades e incluso restaurantes de la zona especializados en la degustación de setas.
Las mejores vistas del valle se obtienen desde Eltso-Gerendiain y Guelbenzu. Desde aquí también se alcanza a ver el valle de Basaburua y las siluetas de las Malloas, que son un conjunto de peñas de la Sierra de Aralar.
Lugares y actividades de interés en el valle de Ultzama
Todo el valle de Ultzama conserva el sabor de antaño. Desde la carretera que atraviesa el valle se pueden ver las vascas pastando en los verdes prados. Las mismas vacas que abastecen los mercados navarros de leche y carne.
El valle alterna zona de pastos con frondosos bosques de robles y hayas. Por eso, aunque cualquier época del año es adecuada para visitar el valle de Ultzama, el otoño es una estación especial, por el colorido de sus bosques y porque además es temporada de setas.
El bosque de Orgi es de todos los bosques del valle el más accesible y preparado. Abarca una extensa área declarada Área Natural Recreativa, situada al sur del valle, en Lizaso, un pintoresco pueblo coronado por su iglesia de los santos Simón y Judas.
A largo del paseo se puede disfrutar de distintos paisajes, desde una selva en miniatura a un camino donde percibir las edades del bosque. A caballo o paseando por sus senderos perfectamente señalizados podemos descubrir las diferentes especies de robles; americano, rojo…Y es que el monte de Orgi es una magnífica muestra de robledal húmedo de la región. Aquí llaman la atención los enormes ejemplares bicentenarios Quercus Robur, una subespecie propia de la zona que es capaz de enraizar en terrenos inundados como es este, inundado por el río Ultzama.
En los Robledales de Ultzama se encuentra la instalación más moderna del valle. Ofrecen cursos de equinoterapia, una técnica que ahonda en los beneficios sobre la calidad de vida que ofrece el contacto con un caballo. Todos los centros ecuestres están abiertos a las visitas que deseen ver la belleza de estos pura sangres y la destreza de alumnos y profesionales que se entrenan aquí.
En diversas instalaciones del valle se crían caballos pura sangre y esta tradición equina del valle se refleja en la creación del itinerario Ecuestre Señalado. Un camino de 25 kilómetros que pasa por la mitad de los municipios del valle y apto para hacerlo a lomos de un caballo.
Las rutas ecuestres pueden contratarse en el centro ecuestre Doble A en Lisazo, que también dispone de ponies para los más pequeños. Las rutas a caballo empiezan siempre en el acceso al bosque de Orgi y duran entre 30 y 70 minutos.
También en Lizaso, se encuentra la Granja escuela Ultzama, uno de os lugares favoritos de los más pequeños. Los niños de la gran ciudad descubren durante 90 minutos un mundo mágico en el que surgen las lechugas del suelo, las gallinas ponen huevos, las vacas dan leche e incluso les enseñan a hacer cuajada.
Cerca del bosque de Orgi se encuentra el Club de Golf de Ultzama, en Gerendiain. El club es uno de los campos de golf más emblemáticos de España. Abierto desde 1965 cuenta con 18 hoyos que cubrir entre robles centenarios.
Y como colofón, la gastronomía del valle de Ultzama
La gastronomía del valle es otro de sus grandes valores culturales. Basada en los productos de la tierra no te puedes perder las sabrosas y tiernas carnes de ternera de Navarra, mejor aún acompañada de las setas de sus montes. Si no visitas el valle en temporada de setas puedes acompañarlas de unos buenos pimientos de piquillo.
De postre su mítica cuajada. Esta receta ancestral está elaborada con leche de oveja. El toque especial se lo da la aplicación a su superficie de una piedra al rojo vivo que le aporta un toque de quemado muy apreciado. Algunos optan por degustarla ya así, al natural y otros regándola con miel casera de alguno de los productores locales.
Y como foodies que somos, no podemos abandonar la zona sin visitar el Museo de la Miel de Eltso. La oferta del museo se incluye una cata de diferentes tipos de miel de cosecha propia. Además de conocer todos los secretos de la miel y del trabajo de los apicultores con las abejas y la cera es posible ver como es una casa tradicional por dentro.
