Son varios los encantos de San Cristóbal de La Laguna, entre ellos la propia ciudad, cuyas calles conservan el trazado de una ciudad del siglo XVI. Paseando por ellas puede admirar bellas mansiones históricas de colores pastel y pórticos de piedra, patios interiores con balconadas de madera, y acogedoras tiendas y restaurantes. Por ello, esta bella ciudad, se utilizó como modelo para la construcción de varias ciudades de América Latina De hecho, el plano de San Cristóbal se lee como un “mapa estelar” y ha sido el antecedente de ciudades como La Habana o Lima.
Otro de sus atractivos son sus habitantes, personas amables, tranquilas, con un acento que enamora. También su ambiente animado y universitario…Es por eso por lo que actualmente sigue siendo una parada obligatoria en nuestro viaje a la isla de Tenerife. Más información…
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Una ciudad patrimonio Mundial desde 1999
Basta un tranquilo paseo por las calles de San Cristóbal de La Laguna para entender por qué forma parte de la lista de la UNESCO.
En sus calles te sientes como si hubieses entrado en una máquina del tiempo que te trasladase a hace más de 500 años, cuando se configuró el trazado de la ciudad inspirándose en las cartas de navegación.
Hoy, esa especie de esencia colonial permanece intacta.
Vamos a visitarla!!!
Visitando la ciudad…
Para visitar la ciudad te recomendamos que te apuntes a una de las guiadas que organiza la Oficina de Turismo. Aquí puedes ver el callejero de la ciudad y en este otro enlace sus principales monumentos.
Si la haces por libre puedes empezar recorriendo la hermosa calle de San Agustín, donde se levantan la Casa Salazar, el antiguo Convento de San Agustín o el Palacio de Lercaro.
Tampoco se quedan atrás en belleza otros rincones como la Universidad, la plaza del Adelantado, la calle Herradores, el Real Santuario del Santísimo Cristo de la Laguna…
Por supuesto no se pueden olvidar la Catedral (la única de Tenerife) y la iglesia de la Concepción. A la torre de esta última se puede subir para tener la curiosa experiencia de estar en un pequeño “rascacielos” con vistas.
También hay que visitar el museo de Historia y Antropología de Tenerife y Iglesia de Santo Domingo de Guzmán.
…Y los alrededores
La proximidad al mar hace posible que entre los planes que se pueden hacer esté también el de acercarse a playas como la del Arenal para darse un buen baño. A pocos kilómetros hay además otras ciudades como Santa Cruz de Tenerife, Puerto de la Cruz y La Orotava y el cercano Parque Rural de Anaga con su Sendero de los Sentidos.
Y aprovechando la estancia en Tenerife, se puede hacer una visita al pico más alto de España, el Teide, para apuntarse a una experiencia que incluya ver el atardecer desde un teleférico y después observar las estrellas en uno de los mejores cielos del mundo para hacerlo.
Su cocina canaria
Una experiencia ideal es sentarse a “ver la vida pasar” en cualquiera de las terrazas de los restaurantes de la ciudad. Y si disfrutas de un helado de gofio o alguna de las especialidades de las isla, bienmesabe, puchero canario, papas…pues mejor.
Si eres un foodie lo mejor es dejarse llevar por los olores de los productos frescos y las flores del Mercado de La Laguna, o si quieres disfrutar de la auténtica comida casera mejor acercarse a alguno de los guachinches de la zona -casas tradicionales de comida típicas de Tenerife- y acompañarlo todo con unos exquisitos vinos de Tacoronte-Acentejo.