Después de haber visitado la ciudad de Astorga y contároslo anteriormente el un post previo, iniciamos hoy un recorrido por los alrededores de Astorga. Visitaremos los pueblos maragatos que aún hoy conservan su fuerte identidad arriera y disfrutaremos de sus atractivos, entre ellos los gastronómicos.
El recorrido hay que hacerlo en coche, lo cual nos llevará apenas una hora y media de trayecto, pero nos dará para disfrutar toda la jornada. Comencemos¡¡¡.
Tabla de contenidos
Un recorrido circular por la Maragatería desde Astorga
Iniciamos hoy un recorrido por los alrededores de Astorga, visitando los pueblos de la Maragatería y disfrutando de su gastronomía.
Castrillo de los Polvazares
Hay varias razones para acercarse desde Astorga a Castrillo de Polvazares. Una de ellas es que este es uno de los pueblos que muestran más y mejor los rasgos constructivos propios de La Maragatería, al servicio de la arriería. Calles ancha y pavimentada en piedra. Portones amplios con arcos de medio punto para entrar y salir sin impedimentos. Patios generosos…
El otro gran reclamo es gastronómico: su cocido maragato, el cual tiene fama internacional, tanto por la contundencia de sus ingredientes, variadas y abundantes carnes, que se finaliza al revés de lo acostumbrado, tomando una sopa.
Santa Comba y Quintanilla de Somoza
Una vez hecha la digestión continuamos nuestro trayecto hasta Santa Comba de Somoza, otra localidad pintoresca donde la arriería es su seña de identidad. Es uno de los pueblos más bonitos de la zona, con buenas casas que dan evidencia del poderío económico del lugar gracias a una serie de familias arrieras de buena fortuna. Aquí se encuentra la Casa Museo de Santa Colomba de Somoza (987 631193).
Más adelante se encuentran las localidades de Quintanilla de Somoza y a continuación el Val de San Lorenzo.
El Val de San Lorenzo
La artesanía textil en Val de San Lorenzo tiene una larga tradición. El Val de San Lorenzo es desde el siglo XVII la capital textil de la comarca y uno de los pueblos más importantes de toda la Maragatería. A mediados del siglo XVIII había en este pueblo ochenta y un fabricantes de paños que llenaban con sus creaciones las ferias y mercados de Puebla de Sanabria, Benavente, Ponferrada, León y varios lugares de Galicia.
El Batán y C.I.T La Comunal
La crisis textil del primer tercio del siglo XIX se deja sentir no solo entre los tejedores del Val que vieron como la mecanización de lugares como Béjar (Salamanca) o Sabadell y Tarrasa en Cataluña se llevaban la palma. Para intentar superar la crisis se empezaron a especializar en la fabricación de mantas y en 1920 un grupo de setenta tres vecinos forman una Comunidad de bienes e instalan la primera fábrica con maquinaria moderna, destinada a cardados e hilados de lana, “La Comunal”, todavía en funcionamiento.
Adquieren también ese mismo año este edificio, el Batán, que ya venía trabajando con dos batanes o pisones de madera, movidos por fuerza hidráulica. Más tarde, los mazos del batán comenzaron a moverse con energía eléctrica.
Hoy, Val de San Lorenzo continúa siendo, aún hoy, un centro textil con tradición artesanal y como no podías ser de otra forma, aquí se encuentra el Museo Textil de Val de San Lorenzo (987 635001), que incluye el Museo Batán y La Comunal.
El visitante del Batán-Museo podrá ver, entre otras cosas, las Perchas de cardos que se usan para sacar el pelo a las mantas. La cardencha o cardo de cardadores, en su variedad cultivada, es lo que se utiliza para ello. Más información…
Santiago Millas
Y aunque luego tengamos que desandar lo andado, no podemos abandonar estas tierras sin visitar Santiago Millas, pueblo que además de una destacada arquitectura arriera, tiene entre sus oriundos q una serie de personajes ilustres. Muchos de ellos, hombres de fortuna, acabaron de una u otra forma relacionados con los gobiernos, el ejército o los bancos. Y es que ya se sabe, el comercio genera riqueza…
Aquí se encuentra el Museo de la Arriería de Santiago Millas (987 630275), el cual muestra aspectos de la vida de esta comarca, costumbres, atuendos y trabajos artesanales y, sobre todo la actividad arriera.
Disfrutando la Gastronomía de la Maragatería
Visitar estas tierras es además, una buena oportunidad para disfrutar de la riqueza de su gastronómica. Una excelente opción es detenerse en alguno de los restaurantes de su casco urbano, para aproximarse a las recetas tradicionales de la comarca.
La gran calidad de las legumbres leonesas se concreta en platos como el cocido maragato, que aquí se degusta en un orden inverso al tradicional. El comensal comenzará por la carne, chorizo y relleno, y terminará con los garbanzos, la berza y la sopa.
También la cecina (carne de vaca curada, secada y ahumada) aquí es un manjar. El botillo (embutido de productos del cerdo cocido), la empanada berciana, el bacalao y las truchas son otras de las opciones más suculentas.
Las manzanas reinetas, cerezas, peras, pimientos y castañas se incorporan en el recetario habitual de la región. Entre los postres, las mantecadas de Astorga son los más apreciados.
Y para regar todas estas suculencias, nada mejor que los vinos de la Denominación de Origen Bierzo.