Vila de Cruces es un municipio situado en la comarca de O Deza perteneciente a la provincia de Pontevedra, en la comunidad autónoma de Galicia. Situado al norte de dicha provincia limita con los municipios de Boqueixón, Touro, Arzúa y Santiso de la provincia de A Coruña, y Silleda, Golada y Lalín en la de Pontevedra. Rodeada por tres ríos, el río Ulla y sus afluentes el río Deza y Arnego, en Vila de Cruces se encuentra el embalse de Portodemouros y su aún atractivo transbordador.
El pueblo ofrece al visitante variados y pintorescos contrastes. Montañas suaves y de diversas morfologías que se mezclan con valles de alternante profundidad y ríos y regatos con amplios remansos y profundos pozos.
Entre su patrimonio natural destaca las insuas-islas-de Remesquide, con un merendero en el centro del Ulla y las de Gres unidas por pasarelas y puentes de piedra. Otros atractivos son la Playa Fluvial de A Carixa en cuyas inmediaciones se encuentra el puente del mismo nombre. El espacio natural del río Arnego o el Muiño da Barca. Todo ello lo puedes conocer siguiendo rutas de senderismo como la se el Sendeiro do Deza, el Sendeiro das Cruces, o la que nos lleva a Espacio natual de O Abeseiro.
Historia y patrimonio
Además de sus Mámoas, una visita imprescindible en Vila de Cruces es al museo de la Minería, el cual trata de mantener vivo el legado cultural e histórico de la comarca. En concreto del poblado minero de Fontao. Este pobloado abandonado en la época de los setenta, surtío a Europa de estaño y wolframio para la fabricación de material bélico durante las distintas contiendas.
También puedes aprovechar tu visita al lugar para conocer el monasterio de San Salvador de Camanzo, la Casa Museo A Solaina de Piloño, con obras de artistas gallegos como Laxeiro o Colmeiro o la Fundación Neira Vilas en Gres. Este con un museo etnográfico y biblioteca en la casa del escritor, autor de «Memorias dun neno labrego», el libro escrito en gallego más vendido de todos los tiempos. El lugar cuenta además con un observatorio astronómico, de propiedad privada, en el cual se realizaban tareas de divulgación astronómica y observaciones científicas. Sin embargo se encuentra actualmente en estado de abandono.
Por último, no puedes abandonar el lugar sin relajarte en su Hotel Balneario Baños de Brea y degustar el famosísimo gallo de Corral, cuya fiesta de exaltación tiene lugar en el mes de mayo.
