Pazos de Borbén es un municipio español de As Rías Baixas en la comarca de Vigo en la comunidad autónoma de Galicia. Ubicado al sur de la provincia de Pontevedra, se encuentra entre los municipios de Redondela, Fornelos de Montes, Soutomaior y Mos, en la comarca de Vigo y de Mondariz y Ponteareas en la comarca de O Condado, formando parte de área metropolitana de Vigo.
Forman parte del municipio las parroquias de Amoedo (San Saturnino), Borbén (Santiago), Cepeda (San Pedro), Hermida, Junqueiras (San Salvador), Moscoso (San Pelagio), Nespereira (San Martín) y Pazos (Santa María).
El municipio es eminentemente rural y no cuenta con grandes monumentos pero sí patrimonio natural y cultural que lo hacen muy atractivo para la práctica del senderismo. Entre sus rutas destaca la ruta de las Fragas del Barragán.
Historia y patrimonio
El municipio de Pazos de Borbén alberga un tesoro arqueológico significativo, con una notable presencia de restos prehistóricos que incluyen grabados rupestres y castros. Conocidos como las Piedras de las Moras o las Piedras de las Cruces, estos grabados se consideran mensajes de un misterioso pueblo desaparecido. Entre los petroglifos más destacados se encuentran «A laxe das cruces dos Carballiños», los petroglifos de Masusán y Alvedosa en la parroquia de Amoedo, así como los grabados en «Castro do Coto do Corno» y la conocida «Pedra das Teixiñas» en las cercanías del parque-mirador del Santo Aparecido.
Aunque en Pazos de Borbén no encontramos construcciones monumentales, abundan las pequeñas edificaciones con encanto y conjuntos arquitectónicos que reflejan la espiritualidad, las tradiciones y las formas de vida del mundo agrario tradicional. Iglesias, cementerios, petos das ánimas, hórreos e incluso fosos de lobos son testimonios del legado cultural y del modo de vida de la comunidad local a lo largo de la historia. Además, el municipio posee un patrimonio etnográfico de gran valor, con ríos adornados por una rica herencia de pasos, molinos, canales y pasos elevados construidos en piedra, representando una combinación única de arquitectura e ingeniería popular. Lamentablemente, este patrimonio se está perdiendo gradualmente a medida que se abandonan los usos agrarios tradicionales.
