La aldea medieval de Siurana es el pueblecito más fotografiado de la comarca del Priorat. Encaramada sobre un peñón, pasear tranquilamente por sus calles empedradas o disfrutar de sus puestas de sol, desde sus alturas no tienen precio.
Siurana se encuentra en el corazón del Priorat. A 730 metros de altitud, entre la Sierra de Montsant y las montañas de Prades. A una hora de Tarragona, 32 kilómetros de Falset y a 15 minutos en coche desde Cornudella de Montsant.
Al pueblo, situado a lo alto de una peña, se asciende por una sinuosa carretera, la T-3225. El camino nos depara una espectacular panorámica, con una silueta que se recorta contra el cielo. Lo mejor, al llegar a él, es dejar el vehículo en el aparcamiento situado junto a las ruinas del castillo y caminar por la calle Mayor hasta su corazón.
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Un pueblo de leyenda
Siurana fue el último reducto de la resistencia sarracena en Cataluña. En su mirador más espectacular, el Salto de la Mora, se recrean sus episodios más legendarios del Medievo. Como la más famosa de la Costa Daurada, protagonizada por una noble morisca.
Cuenta la historia que en 1153 los ejércitos cristianos sitiaron la fortaleza encaramada a lo alto de la peña de arenisca, donde residía el gobernador del lugar y su bella hija Abdelazia. Esta, ante la caída inminente de la plaza se precipitó desde el peñasco a lomos de su blanco corcel, antes de ser sometida, dando lugar a una leyenda que aún hoy susurran los escasos habitantes del lugar.
También otras leyendas hablan de reyes, doncellas, santos, cautivos, traidores y trovadores. Y es que este bello y mítico lugar hubiese sido un digno escenario de película para la épica saga de Juego de Tronos de George R.R. Martin.
Ruta al Salto de la Mora
La ruta del Salto de la Mora es una ruta de senderismo que nos conduce a él por el antiguo camino real de Falset a Gratallos.
A él se desciende por el camino de la Trona, el cual nace junto a las ruinas del castillo y que pasa por el antiguo camino de herradura, llamado así por la herradura de caballo que se encuentra grabada en la piedra.
Las vistas desde este lugar son espectaculares. Por un lado las montañas de Prades y por otro el pantano de Siurana, un lugar ideal para la práctica del Kayak.
Atractivos de Siurana
La bella villa empedrada combina a la perfección su pasado sarraceno y cristiano.
Por un lado, nada mejor que visitar los restos del castillo árabe, construido en el siglo IX y donde rememorar entre sus almenas tiempos no lejanos.
Por otro, la iglesia románica de Santa María, construida en los siglos XII y XIII, tras a llegada de las tropas del rey Ramón Berenguer IV. Situada en el medio del pueblo, consta de una planta de nave única y ábside semicircular. Su excelente estado de conservación permite apreciar el estupendo trabajo de los canteros medievales, en el tímpano de su portada, la cual cuenta con tres arquivoltas y columnas con capiteles.
Pero el mayor atractivo y tesoro del lugar es el propio pueblo. Con sus calles y casas empedradas, engalanadas de macetas de plantas, y donde reina el silencio. Pasear por ellas es todo un placer, incluso por la noche.
Alrededores de Siurana
Cornudella de Montsant
Siurana pertenece a la pequeña población de Cornudella de Montsant. Aquí se encuentran los riscos de la Gritella, antesala de atractivos tan importantes para foodies como nosotros como es el Celler Corporativo, una de las célebres “catedrales del vino” del Priorat.
La bodega fue construída en 1919 por el arquitecto César Martinell, discípulo del genial Antoni Gaudí.
El Parque Natural de la Sierra del Montsant
El Parque Natural de la Sierra del Montsant es un enclave natural único que se puede descubrir a través de la extensa red de senderos que discurren por este abrumador entorno.
Uno de los paisajes más espectaculares de Cataluña es el enclave de la solitaria “Montaña Santa”.
Una propuesta asequible es la caminata que lleva hasta la recóndita ermita de Sant Bartolomeu de fraguera del siglo XII.
Gorgs de la Febró
Las Gorgs de la Febró son unas famosas pozas naturales. Un punto final inigualable para refrescarse en verano tras una ruta de senderismo de dificultad baja (10 kilómetros) desde Siurana.
