La inclusión de España en la Ruta de la Seda, que conforman 32 países, ha motivado que se designe a Valencia como la Capital de la Seda.
La ruta de la seda, es el hilo que marca el camino histórico de la seda y nos descubre la importancia de la seda y su comercio en esta ciudad entre los siglos XIV y XVIII.
Un itinerario cultural guiado que nos permite seguir las huellas de ese pasado y nos llevará a los lugares más emblemáticos en la ciudad.
El barrio de Velluters donde trabajaba el gremio de sederos y en una tienda de indumentaria tradicional valenciana. El Museo de la Seda, que acoge el principal archivo europeo sobre la seda e importantes colecciones de telas en seda y telares del siglo XVIII. O la Lonja de la Seda, el que fuera centro del comercio de la seda en la ciudad.
La ruta se puede hacer de forma libre o participando en un itinerario guiado. Tiene una duración aproximada de dos horas y está disponible en inglés y castellano. Se puede reservar en la web de turismo de la ciudad aunque algunas empresas de turismo activo también la oferta.
Visitas imprescindibles en la ruta de la seda
El barrio de Velluters
El punto de partida de la ruta es el barrio de Velluters (que significa terciopeleros). El barrio tuvo un gran desarrollo entre los siglos XV y XVIII gracias a la industria de la seda. Hoy, basta darte un paseo por el barrio para comprobar que este arte sigue vivo en los talleres falleros de sus calles.
Entre los talleres falleros de Velluters destaca el María Victoria Liceras (Avellanas 22) una de las referencias de la indumentaria tradicional valenciana. Aquí puedes maravillarte con la indumentaria regional que emplea este delicado material, del que hace falta unos treinta mil capullos para confeccionar un traje de fallera.
El Museo de la Seda
Ubicado en este mismo barrio se puede visitar el Museo de la Seda. Aquí puedes contemplar colecciones de telas y telares del siglo XVIII en funcionamiento. Además, el museo acoge el mayor archivo europeo del gremio de la seda y una interesante tienda de productos confeccionados con seda.
El Colegio Mayor de la Seda
El Colegio Mayor de la Seda, completamente reformado e inaugura a mediados de mayo es una exposición cronológica de este arte valenciano con sus dos grandes joyas: el archivo histórico gremial más importante de Europa y el pavimento cerámico de la Fama, una enorme pieza del siglo XVIII integrada por 2117 piezas.
La Lonja de la Seda
Otro punto imprescindible de la ruta es la Lonja de la Seda, en pleno centro de Valencia. Emblema de lo que fue el motor económico de Valencia hasta el siglo XIX cuando el paisaje de moreras fue sustituido por extensos campos de naranjos.
La lonja es uno de los edificios más bonitos de Valencia, declarado Patrimonio Mundial de la Unesco desde 1996. De estilo gótico sus 15 bóvedas de crucería o sus columnas que se abren como palmeras, es una joya de la arquitectura civil. Fue el punto clave del comercio de la seda en la zona y hoy se puede visitar el lugar dónde se hacían las negociaciones: el Salón Columnario.
La seda en los museos
Los museos de la ciudad reflejan la importancia que la seda y su comercio han tenido en Valencia, principalmente durante la segunda mitad del siglo XVIII.
El Museo Nacional de Cerámica posee numerosas piezas elaboradas con seda y su edificio es un importante ejemplo de arquitectura barroca de España.
El Museo de la Catedral expone indumentaria religiosa tejida en seda y el Museo de Bellas Artes y El Patriarca exhibe cuadros con personajes que visten lujosos tejidos de seda que subrayan el valor de la industria sedera en Valencia.
Por su parte, el Museo L’Iber de Soldaditos de Plomo, situado en el palacio de Malferit, tiene una sala dedicada a la ruta de la seda.
La seda en las fiestas
Además, Valencia revive cada año en sus fiestas falleras de San José la tradicional confección en seda con trajes típicos elaborados con este tejido.
Si te gustan, ten en cuenta que existen ateliers dedicados a su confección en los que podrás encargarlos o adquirirlos directamente.
