Fuga mundi en la silenciosa naturaleza de la Sierra Calderona

El Parque Natural de Sierra Calderona está situado entre las provincias de Castellón y Valencia. De gran valor ecológico y paisajístico, este excepcional espacio fue durante siglos y retiro espiritual para importantes comunidades de cartujos.

Hoy realizaremos la ruta de los cartujos, visitando las tres comunidades cartujas más importantes; la de Portaceli en Serra, Valldecrist, en Altura y Ara Christi en Puig.
Para llegar hasta aquí, una opción es desde Valencia por carretera, tomando la autovía Valencia-Ademuz (CV-35). El desvío a la altura de Llíria permite enlazar con la CV-25, la vía que se adentra en el sector occidental del parque natural y acercarse a las poblaciones de Olocau, Marines y Gátova.

La otra opción es desde Sagunto siguiendo por la A-23, lo que permite desvíos hacia poblaciones cercanas como Torres Torres o Altura.

El Parque Natural de Sierra Calderona

El lugar goza de un gran valor ecológico y paisajístico, por lo que lo ideal es conocerlo haciendo rutas de senderismo. El verano es una época idónea para adentrarse en el parque natural porque las abundantes fuentes existentes te aseguran una buena hidratación durante las caminatas, aunque la primavera también es una buena opción, porque la sierra tiene un color especial.

El Centro de Interpretación de la Sierra Calderona

El Centro de Interpretación de la Sierra Calderona-961681993/679195238-es el mejor punto de partida para conocer uno de los espacios más valiosos de la Comunidad Valenciana.
Está situado en Náquera y es un lugar ideal para visitar con niños ya que a través de paneles informativos e interactivos se puede descubrir la flora y fauna autóctona, así como la huella en la sierra de antiguos oficios, como las antiguas carboneras de carrasca, olivos y algarrobos que se utilizaban antiguamente en el lugar para la producción de carbón vegetal

La Asociación Cultural Cartuja de Valldecrist ha establecido un itinerario conocido como la Senda de los Cartujos, ideal para los amantes del senderismo, la historia y la naturaleza. El sendero de unos treinta y siete kilómetros atraviesa la senda por los caminos y senderos que antiguamente recorrían los monjes y criados de los cenobios de Portaceli y Valdecrist

Un espacio natural excepcional

Alejada del bullicio urbano de la ciudad de Valencia, la entrada meridional de la Sierra Calderona, entre las comarcas del Alto Palancia, Camp de Morvedre y Camp de Turia es un paraje silencioso. Rodeado de pinos blancos y enebros aquí puedes oír tu propia respiración al caminar y sentir el aroma perfumado de sus plantas aromáticas como el tomillo y el romero.

Un sitio así es normal que fuese escogido por aquellos que hace siglos buscaban el recogimiento y la soledad. Entre ellos los cartujos, una orden de eremitas fundada en 1804 que hallaron en este rincón de enorme riqueza ecológica un remanso de silencio y paz, ideal para su modo de vida contemplativa.

Una contemplación que alcanza su máximo exponente en los miradores, como el Mirador de la Pedrera o como lo llamaban los cartujos la “puerta del cielo”, un mirador natural sobre el valle de Lullén. O también el Mirador de Garbi, en Estivella, a 601 metros de altitud, el mejor balcón natural sobre la Sierra Calderona y uno de sus lugares más visitados. Desde su atalaya podemos contemplar todo el valle del Palancia, el golfo de Valencia y hasta las Islas Columbretes.

También es una excursión interesante la que nos lleva desde Serra al mirador de Rebalsadores.

Tres cenobios testigos silenciosos de su historia

La Cartuja Portaceli

Situada a los pies del macizo de Rebalsadores se encuentra la Cartuja de Portaceli, rodeada de frutales donde destacan los naranjos.

La cartuja de Serra fue fundada en 1272 por Andreu dÁlbalat, confesor del rey Jaime I, lo que la convierte en la tercera de las fundaciones cartujas en España y primera en tierras valenciana. Bajo las normas de la Orden de San Bruno, aquí encontraron retiro cientos de hombres, y hoy siguen esta pauta los monjes cartujos que todavía habitan la habitan: oración, el trabajo y retiro: fuga mundi. Para no molestar este retiro de los monjes, solo se puede conocer el exterior de la edificación.

Testigo de la riqueza y dinamismo de esta cartuja, sobre todo a principios del siglo XV, es el acueducto de once arcos que abastecía la ciudad y que como la Cartuja se encuentra en perfecto estado de conservación. Esto contrasta con el estado de otro de los cenobios más sobresaliente de la Sierra Calderona: la Cartuja de Valldecrist.

La Cartuja de Valldecrist

Esta cartuja fue considerada la más importante de las cartujas españolas, aunque ya poco queda de su esplendor original, la iglesia de San Martín y la Iglesia Mayor. Sus restos, se encuentra en la población de Altura, a 31 kilómetros de la de Portaceli.

La cartuja fue fundada en 1385 por Martín I, llamado también el Humano o el Viejo. Quinta cartuja de España su esplendor como centro monástico y económico en la sierra no solo quedaba patente en las amplias propiedades que llegó a tener, sino también en sus ilustres moradores como Benedicto XIII, el papa Luna o San Ignacio de Loyola.

Como la Cartuja de Portaceli, tras la desamortización eclesiástica de Mendizábal en 1836, la cartuja fue vendida y entró en un periodo de decadencia, que con el pasar de los años la levó a su estado actual.

La Cartuja de Ara Christi

Por último, para completar este triángulo religioso por la Sierra Calderona solo nos queda dirigirnos a El Puig, donde se encuentra el cenobio de Ara Christi, uno de los referentes de la arquitectura religiosa valenciana del siglo XVII.

Este cenobio fue el proyecto personal de Elena Roig, hermana del chantre de la catedral de Valencia, que cedió esta antigua alquería a los cartujos de Valldecrist. Permaneció habitado no por cartujos sino ya por capuchinos hasta bien entrada la década de los años 70 del siglo XX y tras una restauración, actualmente es un espacio privado en el que se celebra todo tipo de eventos.

Otros lugares de interés por la zona

Además de las Cartujas, aquí también visitaremos lugares de espiritualidad y retiro, como el Convento de los franciscanos de Santo Espíritu del Monte en Gilet, en el Valle de Toliu. Fundado en 1404,  aún hoy en día sigue en plena actividad-

También visitaremos los castillos de Torres Torres, Beselga o Segart, vestigios del pasado dorado de Sierra Calderona.

Serra se encuentra en el corazón de Sierra Calderona, en el paso natural entre el valle de Palanca y el Camp de Túria. En esta privilegiada situación se encuentran los restos del Castillo de Serra, desde cuyas alturas se contempla una hermosa panorámica del valle. Destaca también la torre del Senyor y las torretas de Ría y de Satarenya.

Para conocer la historia y el patrimonio de este lugar tan especial que es Sierra Calderona, visitaremos la Cova Margarita, en Náquera donde encontraremos las huellas del paleolítico. Por último, el asentamiento Puntal dels Llops, en Olocau, donde dejaron su impronta los íberos y Sagunto, donde lo hicieron los romanos. Más información…

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