Entre las comarcas pirenaicas entre las comarcas de La Noguera y el Pallars Jussà , en la frontera entre Lleida en Cataluña y Huesca en Aragón se encuentra de El Congost de Mont-Rebei.
Este estremecedor cañón, tiene unos acantilados de 500 metros de profundidad abierto por la erosión fluvial en el macizo de Montsec. Recorrerlo es toda una experiencia, como también lo es, si visitas esta comarca, acercarse al Parque Astonómico del Montsec o disfrutar del Tren de los Lagos, otro de los grandes atractivos del lugar.
Para llegar a Puente de Montañana a 86 kilómetros de Lleida, hay que seguir la N-230 y una vez allí cruzar el Noguera Ribagorzana, seguir por la C-1311 dirección a Tremp y desviarse a la derecha hacia el Mont-Rebei, cuyo acceso se halla bien señalizado.
La primavera y otoño son las mejores épocas para visitar este lugar ya que en verano hace demasiado calor para caminar y en invierno suele haber niebla en los valles con lo que no se puede admirar bien el paisaje.
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El Congost de Mont-Rebeit en el macizo de Montsec
El Macizo de Montsec es un enorme paredón vertical de roca caliza a mil metros sobre el terreno. Las dulces aguas pirenaicas de los ríos Noguera Pallaresa y Noguera Ribagorzana le han labrado dos tajos profundos hasta la misma base del terreno. Uno de esos tajos, el más profundo y famoso labrado por el río Noguera Ribagorzana al atravesar la Sierra de Montsec es el Congost (o desfiladero) de Mont-Rebeit.
Para explorarlo hay un sendero bien señalizado con marcas de pintura blanca y roja que permite recorrer la parte más angosta y vertiginosas del desfiladero. Sus paredes de medio kilómetro de altura se acercan en algunos puntos a tan solo 20 metros lo que te proporcionarán la medida justa entre la emoción y el vértigo.
Un sendero excavado en la pared oriental añade más espectacularidad al lugar. Una vieja y estrecha senda en forma de herradura parcialmente excavada en la roca, permite disfrutar de una manera especial de este desfiladero.
Se puede regresar por el mismo sitio por el que se ha ido o por otro similar a menor altura, si así lo permite el nivel de aguas.
Inicio de la ruta del Congost de Mont-Rebei
El camino señalizado es sencillo, por lo que se puede hacer con niños. Arranca en el área de la Masieta, a siete kilómetros del pueblo de Puente de Montañana. En poco más de una hora se recorre la zona más escarpada del cañón.
La ruta se comienza bordeando la parte final del embalse de Canelles y sube suavemente durante más o menos un kilómetro y medio (una media hora) al barranco de Sant Jaume, afluente del Noguera Ribagorzana.
Al este de Montgai, en la comarca de Nogueira cerca de Corral de Sant Jaume se encuentra el barranco de la Maçana, un arroyo intermitente que tiene una altitud de 541 metros y que se cruza por un puente colgante metálico de unos 30 metros de longitud, que aunque se balancea un poco es completamente seguro, como lo es el resto del trayecto.
Disfrutando del desfiladero El Congost de Mont-Rebei a pie
Una vez traspasemos el puente colgante empieza el desfiladero propiamente dicho. Cada vez se ve más abajo la línea del rio, habitada por nutrias y tritones de los pirineos. Poco a poco las paredes verticales se van curvando y el cielo sobre nuestras cabezas se vuelve más estrechos a la vez que se divisan las siluetas de águilas reales, buitres leonados, quebrantahuesos y alimoches.
Casi al final del recorrido se forma sobre nuestras cabezas una bóveda de roca caliza de color anaranjado, para de repente, tras doblar un recodo esfumarse el desfiladero como por arte de magia, y dejando al descubierto un río que fluye mansamente.
También se puede recorrer un par de kilómetros más y alargar el paso, atravesando las pasarelas del Montfalcó, instaladas en dos cortados de la orilla aragonesa, a la que se cruza por un nuevo puente colgante. Más información…
Otras formas de disfrutar el desfiladero del El Congost de Mont-Rebei
Navegando
Otra opción para explorar el desfiladero es ir en kayak, navegando por las aguas embalsadas del Noguera Ribagorzana. Esta actividad la ofrecen empresas como Montsec Activa, Zenith Aventura y Kayaking Mont-rebei.
En el Tren de los Lagos
Otra forma de atravesar el Montsec –y todo el prepirineo ledirano- es mediante el Tren de los Lagos (Tren dels Llacs). Un antiguo ferrocarril diesel de servicio regular de pasajeros entre Lleida y La Pobla de Segur, subiendo por las riberas salvajes del Segre y el Noguera Pallaresana.
El trayecto ofrece perspectivas impactantes del pueblo medieval de La Baronía de Sant Oïsme, del desfiladero de Terradets y de cuatro embalses que parecen lagos de montaña, de ahí el nombre del Tren.
El tren sale todos los días a las 9.10 y regresa a as 12.56 salvo el domingo que lo hace a las 10:40 y 17:30 respectivamente. El viaje de algo menos de 90 kilómetros tiene una duración de 1 hora y 50 minutos y cuesta 7€ por trayecto.
Entre abril y octubre además de los trenes convencionales se puede disfrutar de recorridos turísticos en trenes históricos empujados por locomotoras de los años 60. Consiste en una actividad de jornada completa que cuesta 28€. El recorrido en tren se puede combinar con visitas a muesos, bodegas y enclaves naturales de la comarca lo que hace más apetecible si cabe el recorrido. Más información…
En coche
Además de atravesar el Montsec a pie o en tren también lo podemos hacer en coche y así conocer el pueblo más bonito de la zona. Cerca del Congost de Mont-Rebei, al pie de la pared meridional del macizo se encuentra el pueblo de Àger, con sus callejuelas apiñadas a la sombra de la milenaria colegiata de Sant Pere. Una pura estampa medieval.
Àger es unpueblo que puede presumir de la más absoluta tranquilidad de de unos cielos claros y limpios. Por eso, en sus proximidades de ha instalado el Parque astronómico del Montsec.
Parque Astronómico del Montsec
El Parque Astronómico del Montsec dispone de dos grandes telescopios, un celóstato para ver imágenes del sol a tiempo real e instrumentos portátiles. Además, cuanta con una gran exposición permanente y el denominado Ojo del Montsec.
El Ojo del Motsec es un planetario con cúpula móvil de 12 metros de diámetro que permite a grupos de hasta 70 personas contemplar recreaciones del firmamento de hoy en día o de cualquier otra época, así como observar directamente el cielo libre de contaminación lumínica de la zona.
Hay visitas diurnas (7,5€) y nocturnas (10€). Ambas son guiadas, duran dos horas y dan acceso al planetario, al parque de telescopios y a la exposición permanente. También hay visitas familiares y sesiones a la carta.