Burela posee el puerto bonitero más importante de Galicia; y el bonito es la segunda especie más significativa en cuanto a volumen de negocio de la lonja del municipio.
La costera del bonito, aunque sólo dura unos pocos meses, es muy relevante. El bonito del norte es uno de los principales impulsores económicos de Burela, y una de sus señas de identidad. Este producto le aporta a Burela una proyección de cara al exterior clave, lo que repercute, por supuesto, también en muchos otros sectores, como el turismo.
Por todo esto, Burela dedica su principal fiesta a este producto desde hace 35 años: la Feira do Bonito.
La Feria del bonito del Cantábrico
La Feria del bonito del Cantábrico es una fiesta para disfrutar y saborear el mejor bonito del mundo en cuatro formatos diferentes y empaparse de una tradición que hizo crecer un pueblo.
La feria gastronómica es el eje de la celebración. La variedad de actividades que lo integran tienen como principales objetivos la reivindicación de la historia marinera del pueblo y también de su cultura y su gastronomía.
Organizada desde sus inicios por la Sociedad Cultural y Recreativa Ledicia, con la colaboración del Concello de Burela, se celebra anualmente durante el primer fin de semana de agosto. Tiene lugar en el mismo muelle y se ofrecen raciones de bonito en distintas recetas como asados a la parrilla, cocido o en empanadas, entre otros.
Actividades paralelas
Asimismo, durante el día es habitual poder disfrutar de la música de gaitas y por la noche se organizan conciertos. En cada edición, hay entretenimiento y actuaciones musicales con muestras de los artistas gallegos más relevantes.
Paralelo a la Feira transcurre Amarte, Certame Internacional de Pintura Mural. Durante cuatro días, diez pintores plasman en el muro portuario sus lienzos gigantes bajo la misma temática: el Mar.
Paralelamente se prepara una feria de productos ecológicos y artesanos y tienen lugar exposiciones, proyecciones y mesas redondas sobre temas medioambientales y ecológicos.