Caravaca de la Cruz, la monumental ciudad de la fe

Al noroeste de la provincia de Murcia se emplaza la localidad de Caravaca de la Cruz. Entre su caserío, que se extiende en torno a un castillo, se encuentran bellas muestras del Renacimiento murciano.

La Vía Verde del Noroeste es un sendero de 78 kilómetros que aprovecha el antiguo trazado ferroviario que unía Caravaca de la Cruz con la capital murciana. Es un camino lleno de contrastes paisajísticos que se puede recorrer a pie o en bici. Hoy en día, muchas de las antiguas estaciones se han recuperado como albergues, pues Caravaca de la Cruz comparte con Roma, Jerusalén, Santo Toribio de Liébana y Santiago de Compostela el Año Jubilar in perpetuum.

En esta localidad se celebra el Año Santo cada siete años y se puede obtener el jubileo, indulgencia plenaria, solemne y universal. Por eso el próximo Año Santo 2024 es una buena excusa para conocer una de las ciudades más monumentales de la Región de Murcia. Si lo haces coincidir con las fiestas de la Santísima y Vera Cruz y su festejo de Caballos del Vino, el éxito de tu viaje está asegurado.

Caravaca se encuentra a 75 kilómetros de la capital murciana por la autovía RM-15. Desde el norte el acceso más rápido es a través de la RM-714 que enlaza previamente con la A-30. Más información…

Caravaca de la Cruz y su cruz

La zona en la que se asienta Caravaca ya estuvo habitada por las culturas argárica, íbera y romana, pero los orígenes de su estructura urbana hay que buscarlos durante la dominación árabe.

Tras la Reconquista, estos territorios pasaron a ser gobernados por la Orden del Temple y más tarde por la de Santiago. En esta época, durante los siglos XVI y XVII, Caravaca vivió su máximo esplendor ya que se convierte en el centro político de un vasto territorio.

La pequeña y monumental ciudad con una fuerte tradición religiosa, centrada en el Santuario de la Santísima de Vera Cruz. Durante el Año Santo-Jubilar- miles de fieles y viajeros peregrinan a su famoso Santuario. Construido entre los siglos XVII y XVIII dentro de los muros de esta vieja fortaleza y en torno a la reliquia gira la historia y el sentir popular de Caravaca.

El templo debía servir de relicario de la famosa cruz de cuatro brazos, que según la leyenda, dos ángeles bajaron del cielo para que un cura preso en las mazmorras del castillo pudiera oficiar la misa. Desde entonces la Cruz de Caravaca se convirtió en el emblema de la ciudad y el origen de su apellido.

Patrimonio monumental

La población nos muestra un numeroso catálogo monumental fruto de su importancia histórica.

Castillo y Basílica de la Santísima y Vera Cruz

Una de las piezas principales es el castillo que se alza a lo alto de una colina, sobre el trazado urbano de Caravaca. De origen musulmán, fue ampliado en el siglo XV por la Encomienda de los Templarios y más tarde pasó a la Orden de Santiago.

El castillo y basílica de la Santísima y Vera Cruz es un edificio barroco de mármol rojo de Cehegín que cuenta con dos espacios perfectamente diferenciados. La Basílica-Santuario construida en 1617 en el interior de la antigua fortaleza y la parte amurallada que aún cuenta hoy en día con 14 torreones. La portada, que se añadió un siglo más tarde, es de traza barroca. El conjunto es Monumento Histórico Artístico y alberga en su interior el Museo de Arte Sacro e Historia.

Las obras de recuperación del castillo e Iglesia de la Vera Cruz llevadas a cabo en 2003 para acoger el primer Jubileo de la historia murciana, descubrieron nuevos pasos de la muralla y torres desconocidas en la fortaleza. También un aljibe árabe, que en la actualidad forma parte del museo de Vera Cruz. Ahí se exponen todo lo relacionado con el ajuar de la reliquia y la leyenda de su aparición.

Casco viejo de Caravaca de la Cruz

A sus pies se divisa el casco viejo de Caravaca de La Cruz. Tejados de adobe que cubren las piedras de edificaciones de linaje, las cuales esconden palacetes, blasones, casas señoriales e iglesias. Una autentica ciudad medieval, capital de una extensa comarca, que aún conserva el ambiente fresco y pausado de antaño.

Iglesias

Pero Caravaca cuenta con una importante cantidad de iglesias. Destacan la iglesia de la Purísima Concepción, edificada en el siglo XVI sobre la antigua iglesia de la Cofradía Hospitalaria de San Juan de Letrán. De factura renacentista, en su interior conserva bellos artesonados mudéjares y retablos barrocos.
Completan el recorrido cultural el Convento de Nuestra Señora del Carmen, la iglesia de la Soledad, hoy Museo Arqueológico; el Convento de los Carmelitas, fundado por San Juan de la Cruz… Pero si hubiese que destacar alguna por su magnífica monumentalidad, esa sería la de El Salvador. Este es el mejor templo del renacimiento murciano, junto al de Santiago en Jumilla.

La Iglesia de El Salvador

Emergiendo entre las estrechas calles medievales, la armoniosa Iglesia de El Salvador declarada Monumento histórico Artístico.

Edificada entre los siglos XVII y XVIII es uno de los grandes reclamos de la arquitectura religiosa de la región. Cuenta con cuatro magníficas columnas jónicas estriadas, soportando las nervaduras góticas de su bóveda y su sobria monumental fachada. Un soplo de aire fresco renacentista en un lugar en el que casi todo, no solo la arquitectura, es barroco.

El Templete

El Templete es uno de los monumentos más emblemáticos de Caravaca de la Cruz. esto es debido a su alto nivel simbólico para los actos religiosos relacionados con la Stma. Cruz de Caravaca.

Este bello edificio del siglo XVIII de estilo barroco, con planta hexagonal, es obra del arquitecto murciano José López. Su construcción se inició en 1762 sobre el solar de una capilla anterior y se concluyó en 1801. Se encuentra  en La Glorieta, ubicado en la C/Corredera, un lugar muy representativo del conjunto artístico de la ciudad, a pocos metros del monumentos a San Juan de la cruz y del Convento de los Padres carmelitas.

Cada 3 de mayo se recogen en él las aguas de las Fuentes del Marqués, dando lugar a un importante ritual religioso. Más información…

Museos

Igual que existen muchas iglesias también en Caravaca hay muchos museos. Además del Museo de la Vera Cruz, en la basílica, también hay otros de importancia.
Uno de ellos es el Museo Arqueológico en la antigua iglesia de la soledad hoy desacralizada. Cubre diversas épocas de la historia de la comarca del noroeste de Murcia. Muchas de sus piezas proceden del yacimiento de La encarnación. Entre ellas un dintel epigráfico.
El Museo de la Fiesta dedicado a los festejos de Moros y cristianos y a los Caballos del Vino. Ubicado en el palacio de Uribe. A él se une el Museo de los Caballos del Vino.
También el Museo del Carrillero, el de Miniatura y el de Música Étnica, en la cercana pedanía de Barranda, a 14 kilómetros de Caravaca.

Alrededores

Las Fuentes del Marqués

A unos dos kilómetros de la ciudad se encuentra un paraje natural, en el que nace un manantial de aguas frescas y cristalinas. Se trata de las Fuentes del Marqués. Este manantial mediante una distribución de acequias, dan lugar a un envolvente y frondoso paisaje.

El torreón de los templarios

También en este maravilloso lugar se encuentra el Torreón de los templarios. La edificación data del siglo XVI, pero posiblemente fue erigida sobre otra anterior de origen templario. Alberga el Centro de interpretación de la Naturaleza.

Fiestas y eventos

En la primera semana de enero, desde el día 8, día de la apertura del Año Santo, hay un intenso programa de actividades religiosas y culturales, por lo que es un buen momento para visitar este lugar.

También es un buen momento para visitar Caravaca del 1 al 5 de mayo, cuando se celebran las fiestas de la Santísima y Vera Cruz, de interés turístico internacional. Hay celebraciones de Moros y Cristianos y el festejo, único en el mundo de Caballos del Vino, una carrera desenfrenada de caballos ricamente adornados con bordados de oro y seda.

Además, el tercer domingo de cada mes se celebra el Mercado del Peregrino, que reúne productos típicos y de artesanía. Y en Barranda, se celebra cada último domingo de enero la Fiesta de las Cuadrillas de Barranda, en la que diversos grupos (cuadrillas) cantan e interpretan en las calles.

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