Hoy hablaremos de las aguas de Galicia, pero no para beber.
Galicia es conocida en toda España por ser, sobre todo, una tierra para agradar paladares exigentes. Y es que aquí se puede disfrutar de la más exquisita gastronomía local. Pero Galicia es más. Es también un lugar para disfrutar del más selecto turismo de bienestar y salud, al liderar la oferta nacional de turismo termal con más del 20 % de los establecimientos balnearios de toda España.
Las oferta de las aguas de Galicia son diversas, hoy os hablaremos de los balnearios y talasos de esta bella y agraciada comunidad.
Tabla de contenidos
Balnearios
Los balnearios, a diferencia de los Spas, son instalaciones que han de contar con un recurso natural imprescindible, el agua mineromedicinal. Estas aguas, en función de su tipología y administradas por un médico competente, en los tiempos adecuados, dan lugar a tratamientos terapéuticos con propiedades preventivas y curativas sobre ciertas enfermedades.
Conocido es que durante siglos, nuestros antepasados aprovecharon estas propiedades terapéuticas al acudir a las pozas para bañarse y así mejorar ciertas dolencias. Pero si nos remontamos aún más allá en el tiempo, la tradición del termalismo en Galicia viene aún de más lejos. Los romanos ya supieron aprovechar la gran cantidad de manantiales que aquí se encontraban para mejorar su salud y también para relajarse.
Literatura, leyendas y canciones populares han hecho desde siempre referencia a las propiedades de las aguas termales gallegas. Porque en Galicia, la abundancia, calidad y singularidad de sus recursos termales la hacen única.
- Abundancia porque cientos de captaciones termales y genuinas pozas se dispersan por todo su territorio dando lugar a veintiún balnearios con más de tres mil plazas hoteleras.
- Calidad porque es la comunidad con mayor número de establecimientos termales de España distinguidos con la Q de Calidad turística.
- Y singularidad, por la enorme variedad de oferta termal; Balnearios y talasos para distintos gustos y presupuestos que permiten al usuario elegir el que mejor se adapte a sus necesidades.
Hay que tener en cuenta que muchos de estos balnearios tienen asociado un hotel que puede ser de distinta categoría (desde 1 a cinco estrellas), por lo que sus características, clientela y ambientes también pueden ser muy dispares.
Por eso, en Galicia encontrará desde un balneario tradicional en el que mejorarse afecciones, a uno lujoso con los más completos tratamientos de salud, relax o estética. Establecimientos que además se integran en la naturaleza y despliegan toda una oferta de restauración de lo más apetecible.
Talasos
A la oferta termal de los balnearios de Galicia de aguas mineromedicinales se le une también una excelente oferta de talasos. Porque Galicia está rodeada de mar, imprescindible para realizar talasoterapia. El nombre de talasoterapia proviene del griego thálassa, que significa mar y therapeia, que significa curación. Y es que el agua de mar también posee múltiples beneficios para relajar el cuerpo y la mente .
Los talasos, han de contar por lo tanto con el agua de mar, la cual concentra todas sus bondades, pero también con otros elementos de su entorno como algas, limos, lodos e incluso el aire marino. Este es el motivo por el que han de estar ubicados cerca de la costa.
Otro requisito fundamental de estos centros es contar con una tecnología capaz de asegurar la pureza del agua captada y su constante reciclado. Esta agua, al ser calentada a 37ºC, facilita la absorción a través de la piel de los oligoelementos y minerales marinos. Por lo que, además de programas de relax y belleza, la talasoterapia está muy recomendada para recuperarse de traumatismos e intervenciones del aparato locomotor, procesos reumáticos y desgaste articular, así como de afecciones respiratorias, cutáneas o ginecológicas.
Al igual que ocurre con los balnearios, hoy en día además de tratamientos con agua se realizan tratamientos con algas, barros y sales marinas e incluso a veces combinadas con otros productos como el vino e el chocolate que proporciona experiencias nuevas, distintas y estimulantes.
Por todo ello…
Para ir a un balneario o a un talaso no se tiene que estar enfermo. Igual que en la época dorada del termalismo a finales del siglo XIX principios del XX los balnearios eran grandes centros sociales, hoy en día muchos balnearios y talasos son instalaciones vanguardistas, ligados a hoteles cuatro y cinco estrellas. En ellos se dan cita no solo personas mayores sino también un público más joven que busca no solo aprovechar las ventajas terapéuticas de sus aguas, sino disfrutar de múltiples actividades de estética, bienestar y relax.
Tú eliges las aguas de Galicia que quieres disfrutar. Las aguas mineromedicinales de los balnearios o el agua de mar de los talasos. De ese mismo mar, que también ofrece en Galicia los pescados y mariscos más selectos del mundo. O el agua de los ríos gallegos. Ríos que conforma paisajes de singular belleza, donde los viñedos encuentran las condiciones ideales para producir excelentes vinos para degustar.
Por todo ello, conjugando lo mejor de nuestra tierra con el descanso en balnearios y talasos, no hay disculpa para no vivir Galicia a través de sus aguas, decantándose por la vertiente más lúdica o por la más terapéutica del termalismo, o mejor…Porqué no por ambas. En Galicia hay donde elegir. Veintiún balnearios y tres talasos. ¿Alguien da más?.