Las idílicas playas de sotavento de Jandía son conocidas mundialmente por sus finas arenas bañadas por aguas turquesa. Para llegar hasta ellas tenemos dos maneras.
La primera es enfilar la recta que baja por la isla-playa. La segunda es desviarse al oeste para recorrer el Parque Rural de Betancuria y la costa occidental de Pájara.
Dado el buen clima que reina durante todo el año en la isla de la isla tranquila, Fuerteventura cualquier momento es bueno para hacer esta excursión a Betancuria.
El aeropuerto de Fuerteventura se encuentra a 5 kilómetros de la capital, Puerto del Rosario. Betancuria se encuentra a 30 kilómetros del aeropuerto y a 67 de Costa Calma. Está conectado con varias ciudades con compañías como iberia Express, Air Europa, Vueling, Ryanair, Norwegian Air Shutte.
Los vuelos interinsulares son continuos con Binter Canarias, Canaryfly. Para moverse por la isla lo mejor es alquilar un coche con empresas como Cicar.
En nuestra ruta recorreremos una isla más desierta, fuera de las aglomeraciones y los hoteles de todo incluido. Desde Betancuria a Pájara en la zona de barlovento. Una zona que conserva la esencia y encanto de Fuerteventura, con grutas volcánicas y bellas y agrestes playas.
Nuestro punto de partida es un mirador antes de llegar a la capital histórica de Canarias, Betancuria, un lugar de insuperable belleza. ¿Nos acompañas?
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El Mirador de Morro Velosa y Betancuria
Nueve kilómetros antes de llegar a Betancuria nos encontramos el Mirador de Morro Velosa en la cima del monte Tegu. Diseñado por Cesar Manrique se encuentra a 669 metros de altitud. Dispone de centro de interpretación, centro insular de artesanía, telescopios y bar.
Luego llegamos a la aldea de Betancuria un lugar que con poco más de cien habitantes llegó en su día a ser la capital histórica de Canarias. Su conjunto histórico, con blanca mampostería, teja árabe y palmeras atestiguan este pasado, en el que fue capital de la isla entre 1404 y 1834.
Aquí se encuentra la Catedral de Santa Maria de Betancuria, de la que destaca el artesonado de la sacristía, las laudas sepulcrales del pavimento y el museo de arte sacro que está en el interior. La Casa Santa María es un multiusos, que tanto sirve de sala de exposiciones que de centro artesanal o restaurante.
En la Iglesia Vega de Río Palmas en Betancuria se venera la talla de la patrona de la isla. Antes o después se debe visitar la exposición de la Casa de la Naturaleza.
Existe una ruta de senderismo que parte de Vega de Río Palmas y llega bordeando al pantano de Las Presitas. Hay que tomar el barranco que, entre vistosas rocas y pozas, lleva a la ermita de nuestra señora de la Peña, que recuerda un milagro local. Después de algo más de cuarenta minutos caminando aparece un oasis de palmeras africanas que se animan hasta la lujuria, el mismo elegido por Moisés para casarse en la película Exodus: dioses y reyes (2014).
Descubriendo el queso de Fuerteventura
No debeos abandonar la aldea de Betancuria sin pasar por la Quesería Granja La Villa en la localidad de Llano de santa Catalina. Aquí podemos llevar uno de los mejores recuerdos de la isla para degustar en la tranquilidad de nuestra casa, un queso de cabra de la DO Queso Majorero. La explotación pecuaria elabora alrededor de 8000 kilos de queso por temporada y dispone de tienda de venta directa donde adquirirlos ya que está abierta todo el año.
Como Foodie también te puedes acercar al museo del queso Majorero ubicado en el antiguo Centro de Artesanía. “Molino de Antigua” y vivir una experiencia única en torno a este delicioso alimento exclusivo de la isla.
Pájara, Ajuy y otros atractivos de la isla
Nos enfilamos ahora en dirección a Pájara por la carretera. En nuestro camino descubrimos la Montaña de Teta, llamada así por la forma que nos recuerda, hasta llegara a Pájara.
Pajara es como un pueblecito de casas blancas, pese a ser el municipio más grande de Fuerteventura. Conserva su aspecto rural y también sus costumbres.
La isla tiene muchos atractivos, gastronómicos y otros. Por ejemplo en Ajuy, cuya playa triunfa por su ambiente pesquero y sus restaurantes de pescado a buenos precios. Pero si lo tuyo es la geología podrás conocer la más antigua de Canarias paseando por las cuevas y acantilados hasta dar con el arco pétreo de El Jurado, muy visitado por geólogos.
Nuestra ruta hacia Costa Calma descubrimos e mirador de Sisacumbre, dotado de reloj solar y mapa de estrellas, dala la nula contaminación lumínica de la zona. Luego encontramos las llamadas casas de La Pared, que hacen alusión al istmo de cinco kilómetros que aísla la península de Jandía.
A partir de aquí encontramos una sucesión de playas, empezando por la playa de Viejo Rey, la más parecida a la famosa playa de Cofete. La playa de Sotavento de Jandía es una playa de postal. De aguas cristalinas, arena blanca y sin apenas hoteles.
Otras son las de Ventosa y la Barca son playas perfecta para iniciarse en los deportes náuticos especialmente el windsurf y el kiteboarding …y así podríamos seguir, ya que si algo hay en Fuerteventura, como isla que es, son playas.
