La ruta que recorre el curso del río Piedra es para todos aquellos que les guste la variedad, pues aquí, en Nuévalos, en el sur de Zaragoza, se alternan dos paisajes diametralmente opuestos. El contraste entre el seco cañón del curso alto y el exuberante paisaje tropical del parque es uno de los más llamativos de la geografía española y justifica por sí solo la vista.
Al principio, aguas arribas del Monasterio de Piedra el rio transcurre a través de un árido paisaje de cañones donde sobrevuelan los buitres. Más abajo, el río se despeña entre árboles gigantes y ruinas monacales formando algunas de las cascadas más bellas de España.
Nuestra ruta parte del Monasterío de Piedra. Luego subiremos en coche por el valle para ver los ojos de Cimballa y luego realizaremos una ruta de senderismo entre las hoces. El Monasterio de Piedra se encuentra en el municipio de Nuévalos, a 112 kilómetros de Zaragoza por la autovía A-2 y desviándose en Calatayud (salida 231). Para llegar desde Madrid hay que desviarse en Alhama de Aragón (salida 204) y luego para continuar la ruta seguir valle arriba por la carretera A-202 dirección Molina de Aragón para desviarse seis kilómetros después por la Z-V-4121 hacia Cimballa y Torralba de los Frailes.
Cualquier época del año es ideal para realizar esta ruta salvo el verano, pues las hoces del río Piedra se convierten en un auténtico horno.
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El Río Piedra y la ruta del Monasterio de Piedra
El río Piedra, afluente del Jalón nace en Rueda de la Sierra, en la parte más oriental de Guadalajara. Poco después de su nacimiento se introduce ya en la provincia de Zaragoza tras rodear el castillo de Embid. El rio fluye prácticamente seco todo el año a través de unas fantasmagóricas hoces calcáreas hasta llegar a Cimballa, donde gana caudal. A partir de aquí el río forma un sinfín de cascadas que adornan el parque del Monasterio de Piedra, de unos dos kilómetros de perímetro.
El parque del Monasterio de Piedra es un auténtico lugar que gira en torno al agua. El recorrido acondicionado por las grutas llenas de musgo como la de la Bacante, y lagos donde se reflejan su espectacular vegetación de enormes árboles y saltos de agua de hasta 50 metros y donde destacan las cascadas de El Baño de Diana, Caprichosa, Cola de Caballo, Iris…
La ruta se realiza por libre, lleva entre dos horas y media y tres horas y en el se encuentran perfectamente señalizados los nombres de los lagos, grutas y cascadas que atraviesa. El parque abre de 9:00 a 19:00 en verano y de 9:00 a 18:00 en invierno y la entrada cuesta 15€.
La visita incluye el recorrido, una exhibición del vuelo de rapaces (desde mediados de marzo al 2 de noviembre) y la visita guiada al monasterio cisterciense- Monasterio de Piedra-, un cenobio cisterciense de sobria fachada que alberga también los museos del Vino y de Carruajes y una exposición sobre la historia del chocolate, que aquí se elaboró por primera vez en Europa, en 1535.
El Monasterio de Piedra
El monasterio fundado en el 1194 por monjes cistercienses procedentes de Poblet. Cuenta con una sobria y elegante sala capitular del recinto monástico, la cual se abre a la galería oriental del claustro mediante una portada flanqueada y dos ventanales siguiendo el modelo de los monasterios del císter.
Tras la desamortización, el hijo de su nuevo propietario, Juan Federico Muntadas creó aquí, en 1866, la primera piscifactoría de España.
Los Ojos de Cimballa
El río Piedra nace a 40 kilómetros Cimballa, pero como hemos mencionado antes, es aquí donde recibe la mayor parte de su caudal.
El agua mana a través de cinco ojos o caudales kársticos, de unos cuatro metros de diámetro cada uno, crean un pequeño y bonito humedal lleno de álamos y otra vegetación a la orilla del río.
Junto a los ojos encontramos, en la ladera del monte más próximo un moderno mirador, obra del arquitecto Sergio Sebastián Franco.
Las Hoces del Río Piedra
Existen dos caminos señalizados que permiten recorrer las Hoces desde Torralba de los Frailes, el lugar más indicado para adentrarse a pie en las hoces del rio Piedra. . El primero es el sendero de gran recorrido GR2, 4 que conduce rio abajo hasta Aldehuela de los Liestos (unos 10 kilómetros y unas 3 horas solo ida). El otro es el sendero circular de las Hoces de Torralba (9,2 kilómetros y algo menos de 3 horas) que lleva río arriba.
El acceso a las hoces está señalizado a la salida del pueblo, junto al humilladero y es un amplio camino de tierra que nos lleva en una hora de ligera bajada por el Barranco de la cañada hasta el meandro del río piedra. Aquí yacen los restos de un molino del siglo XVIII, el molino de Torralba, que se alimentaba de agua.
Si las cascadas llenas de vida del monasterio de Piedra nos han llamado la atención, la aceña de sillares descabalados, los decrépitos chopos, los erosionados torreones calcáreos en las cornisas del cañón y el rio sin agua no nos puede dejar indiferentes.
La Laguna de Gallocanta
En la web de turismo de Aragón puedes encontrar descripciones y mapas de los distintos itinerarios.
Cerca de las hoces del río Piedra (a 18 kilómetros) se encuentra la laguna de Gallocanta, una inmensa laguna salada donde llegan a acumularse hasta 70000 grullas que con sus graznidos llaman poderosamente la atención. Pero visitarla nos llevará otra jornada, por lo que la visita a Gallocanta, el hogar de las grullas, lo dejaremos para otra ocasión.
